* Promete la terminación del nuevo hospital en Tuxtepec y regresar a inaugurarlo

Durante su gira de trabajo por Tuxtepec, Oaxaca el Presidente Andrés Manuel López Obrador dijo que por el ritmo de su trabajo parece que ha gobernado por diez años.

El Mandatario se reunió con el presidente de Tuxtepec y con ediles de la región para evaluar los caminos artesanales que se construyen en la zona.

El sol típico de la región no detuvo a decenas de personas que se reunieron en el Parque Juárez para ver al tabasqueño, quien encabezó la reunión en el Ayuntamiento, donde despacha el Alcalde Irineo Molina.

Tras el famoso lema de “presidente, presidente”, “que salga, que salga”, al término de la reunión el Mandatario se asomó al balcón del palacio para saludar a la multitud que lo esperaba de manera impaciente.

El grito ensordecedor de la población cedió cuando el Mandatario pidió una bocina y un micrófono para hablarle al pueblo que anhelaba escucharlo.

“No se preocupen, ya está autorizado el presupuesto para el año próximo”, “está garantizado el recurso, todos los programas del Bienestar”, dijo.

Asimismo dijo que en enero la pensión de los adultos mayores va a pasar de 4 mil 800 a 6 mil pesos y va a aumentar el número de becas, lo cual causo una ola de gritos y aplausos entre la multitud.

En cuánto a Tuxtepec, el Mandatario prometió que va a concluir un hospital que se construye y regresará para inaugurarlo.

“Ya no hay avión presidencial, decidimos mejor hacer hospitales, por la venta del avión uno de esos hospitales se construye aquí”, al tiempo que dijo “Amor con amor se paga”, mientras que el pueblo gritaba y aplaudía de alegría.

López Obrador llegó en un helicóptero a la Unidad Deportiva de Tuxtepec, donde fue recibido por decenas de personas.

Fue así como el pueblo de Tuxtepec y sus alrededores se dio cita para recibir al Mandatario que para muchos es uno de los mejores de la historia.

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Tras el famoso lema de "presidente, presidente", "que salga, que salga", al término de la reunión el Mandatario se asomó al balcón del palacio para saludar a la multitud que lo esperaba de manera impaciente.